Estimados Docentes y No Docentes de la FCE:
Antes que nada quería expresarles mi deseo de que estén bien todos ustedes, junto con sus afectos.

Estamos viviendo momentos muy difíciles por el temor a enfermarnos, la situación de encierro, de incertidumbre, de separación de algunos de nuestros familiares y amigos, circunstancias que lamentablemente no pueden ser sustituidas por la virtualidad.

Finalizada esta primera semana de clases, tengo que agradecerles el enorme esfuerzo que están haciendo por sobrellevar las intensas y atípicas actividades que todos están realizando desde sus hogares para que la FCE se mantenga funcionando de la mejor manera posible.

Esta situación nos tomó por sorpresa a todos, y a pesar de que muchos pudieron haber adoptado una actitud no colaborativa ante el abatimiento, todos ustedes respondieron siempre con fortaleza y optimismo ante esta crisis no deseada. 

En un tiempo record, han hecho todo lo posible por capacitarse y profundizar el uso de herramientas que hasta ahora funcionaban solo como un apoyo a la presencialidad, transformándolas en medios válidos para seguir enseñando dentro de nuestras posibilidades. 

Ante las dificultades, la respuesta de ustedes fue siempre más trabajo, sustrayendo muchas veces días y horarios normalmente destinados a la familia y el ocio. Todos ocuparon su lugar y cumplieron sus roles de una manera excepcional, de modo que no me resta más que agradecerles. 

Quiero terminar con un especial agradecimiento a las secretarías y direcciones de gestión y sus colaboradores, directores de departamentos y de carreras, consejeros, docentes-investigadores y a los equipos de Servicios Generales, Cooperadora, Centro de Estudiantes, Alumnado, Bedelía, Personal, Despacho, Mesa de Entradas, Difusión, Apoyo Informático, Biblioteca y en general a todos los integrantes de nuestra comunidad que no bajaron los brazos y siempre buscaron soluciones a todos los problemas que fuimos enfrentando.

A todos los que molesté mucho más de lo normal, muchas veces dentro de horarios inusuales, vuelvo a pedirles perdón.

Ojalá esto pronto termine y les pueda agradecer personalmente lo realizado, que sin dudas, ha superado con creces las obligaciones del cumplimiento de sus funciones.

Dr. Sergio Hauque
Decano